10 de febrero de 2007

Viernes ...ah no , sabádo



Aquí estoy tomándome una polarcita, para los amigos machos vernáculos debe ser extraño.Pero sí, (no he hecho la tarea de las 5 cosas que no saben de mi, disculpas a mi amiga de la Guachafa, no me he inspirado) me encanta la cerveza, y la polar mas que ninguna, solo una holandesa ha podido acercarse pero que va, me quedo con el sabor a Venezuela.Estaba chateando con Laura una venezolana casada con un holandés que vive en Francia, que mezclote comadre, jajaja le comentaba que hoy es viernes de recuerdos, no se... hoy es un día en el que he visto a Venezuela desde el lado bonito, coño que recuerdos tan bellos guardo de mi patria querida (escoñetadita si ) pero mía.

Me acuerdo cuando me iba con Juan (cuando todavía eramos novios) a Morrocoy, la verdad es que yo en mi vida conocí nada mas bello que ese parque ( en cuanto a playas se refiere) bueno si también en Venezuela, porque Aruba será Aruba , y Acapulco será Acapulco, pero Morrocoy es Morrocoy.Confundíamos días y noches, no estábamos seguros nunca si amanecía o era el atardecer, entre risas y sueños pasábamos los fines de semana sin querer regresar a la gran ciudad, en fin el agua cristalina nos permitía ver la felicidad de frente reflejada en nuestros rostros.Extraño aquellos días que aún llenan mi vida de satisfacción.

Recordaba mis excursiones por la Laguna Negra, El pico Bolívar, la Laguna de Mucubají, el Pico el Águila, con aquel "calentaito" sabroso que nos quitaba el frío, o el "chirrinche" bebida que como decían las baquianas amigas mías: el primer trago te sabe a mierda, el segundo ya no tanto, y al tercero ya no sabes que es lo que estas tomando! es una bebida que hacen en Maracaibo (según ellas) con unas hierbas asquerosisimas, pero les digo que de verdad al tercero ya no sabe ni mal la cosa, en fin tantas cosas hermosas del estado Mérida...

La Hacienda los Manantiales, en San Diego de los Altos, donde cogía las estrellas con las manos y las regaba en el patio sin fin que tenía la hacienda, donde la vista no alcanzaba a ver el límite de las tierras.Donde cada mañana podías escuchar el trinar de los pájaros mas extraños y hermosos, donde leíamos a luz de velas porque no existía la electricidad, donde la poesía se adueñaba de las noches, donde el frío se convertía en el mejor aliado para no dejarnos dormir y compartir todos esos cuentos de caminos, la nevera funcionaba con kerosene y llegar allí costaba una media hora en Jeep.

Dígame la Península de Paragüaná, dios mio que belleza, acampar allí es de gente con suerte en la vida, definitivamente he tenido mucha suerte.Allí nos reíamos mucho porque se escuchaba una emisora de Curazao (papiamento) ahora para mi es cotidiano escucharlo, pero en aquel entonces era época de burlarse de todo, hasta de la mamá de uno,jajajaja.La arena es tan suave que sería incapaz de hacerte daño y el agua templada que cubría el calor de aquellos días.

Le estaba preguntando ami amiga Yolanda Díaz el nombre de un sitio que me mató en Mérida y se me fue de la mente, pero la muy pajua no me responde , así que se los diré en mi próxima entrega turística.

Bueno no les contaré mas nada por hoy, creo que las lagunas polares están viniendo muy seguido, jajaja será hasta la próxima amigos.

11 comentarios:

Lena yau dijo...

Ale...!!!!Yo también soy cervecera!!!! JAJAJAJA! Bebo vino y cerveza de resto nada, algún martini, alguna copa de champagne, pero lo mío es la cerveza!!! Qué rico! Una polarcita helada! Me gusta la cerveza de verdad, no ese invento light que sabe a agua y no emborracha! Y tomarte una cerveza helada al día siguiente, con ratón y ceviche! Lo máximo! jajaja!
Si te hace sentir mejor yo tampoco he hecho la tarea de Guachafa. Pero la voy a hacer! Lo juro! jajaja!
Te debo un email. Bello todop lo que recuerdas. Fíjate, yo no lo pienso tanto, no sé si porque tengo nueve años fuera de Venezuela o porque es un mecanismo de defensa!

besos

Si quieres leer un cuento mío, entra en el link de los Hermanos Chang y busca un cuento que se llama "Una fiesta para Dino"
besos otra vez

Jackie dijo...

Ale: Me mataste con el post y la FOTO. Practicamente desde que llegué a Canadá estoy llorando por Morrocoy. NO HAY NADA MAS BELLO EN LA VIDA.
Es tan bello que duelen los ojos al verlo. (la verdad es que me duelen porque no me quito la máscara de buceo en todo el día JAJAJAJ!!!!)

Y MERIDAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!!
Nada como las vacaciones que hemos pasado (varias) en el páramo. Yo estoy en Canadá: pinos y lagunas, pero el páramo es un paisaje de otro planeta y ge gente de Mérdia es única, la comida, las posadas... dime cuál es ese sitio a ver si te ayudo con el nombre.

Cómo le vas a decir eso a la pobre Yolanda Días, chica!!!

Un beso de cerveza Polar.

Nostalgia dijo...

Aleee!!
Te regalo mi nickname porque creo que -en estos momentos- te va mejor!!
Yo no soy tanto de polarcitas sino de vodkitas, pero igual me anoto en una cruzada de mocos y nostalgia por Morrocoy, Margarita y todas esas maravillas juntas...
A ver cuando cuadramos una larga conversa para compartir anécdotas entre tragos y lagrimeos. Y mucha risa también, nojoda. Que todo en la vida se cura con unas buenas carcajadas!

Besos morrocoyeros ♥

El Trimardito dijo...

Mi querida Alejandra, el sabor de esta tierra, es la que nos llevamos dentro en cada lugar donde estamos o donde vamos, voy hacer una selección de fotos de lugares maravillosos de esta tierra, para que la recuerdes mejor aún.
Gracias por tus comentarios y si siento el toque de falta de Venezuela, entonces buscaré la forma de comunicarme con gente chevere, porque así me parecen, hasta Laura, por su forma de escribir parece así.
Saludos a tu hermosa familia, de un tipo que un día se metió a escribir un blog, se puso un nick feo y consiguió gente buena por este medio.

Victor Escalona dijo...

Cuànta nostalgia hay en este post chama. Yo tengo años sin ir a Mérida pero es un lugar mágico de verdad.
Debo confesarte que yo no bebo (no vale, no soy evangélico, ni sufro alguna enfermadad loca), debo ser uno de los pocos músico sin cultura etílica en Venezuela. ¿Cómo me entretengo en la rumbas?, bueno he optado por tomar pepsi toda la noche para evitar la PREGUNTADERA y disfruto igualiiito que los demás.

Miguel Pinto dijo...

Cuando a mi me da por recordar esos sitios tan espectaculares, como Caruao, El Pozo del Cura, Bahía de Cata, La UCV, Morrocoy, Canaima, Choroní, y otos muchos más, se me viene a la mente una sola pregunta: ¿Y que carajo hago yo aquí, en Holanda? Claro, a los cinco minutos me acuerdo porque y digo: ¡A pesar de toda la nostalgia, aquí estoy mucho mejor! Es triste decirlo, pero es así.

Waiting for Godot dijo...

Chama, en esta vida yo siempre disfruto los amores y las cosas bellas presentes, y cada día me nutro de todos los amores que me rodean, todas las cosas bellas que nutren mi vida esté donde esté... Yo creo que debes considerarte privilegiada, estás aquí con tus amores rodeandote, yo conozco mucha gente que viene aquí y deja no sólo a su país sino a sus hijos, y eso si es duro, porque además son ilegales y no pueden volver, tu gracias a Dios no eres ilegal, tienes tus hijas y tu esposo aquí y además la posibilidad de viajar cuando te entre el guayabo.... pa qué más!!!!

Curiosa dijo...

Que bien describes esos parajes y con que gusto Ale.
Yo he estado en Cancun y aunque de verdad esas playas son increibles NO HAY NADA como Morrocoy y los cayos uhmmm que delicia. Que rico nuestro Mérida y el brandy contra el mal de páramo jeje,que rico nuestras playas, que asquerosamente rico es el calor de mi maracaibo querido ( y eso que he estado alla solo una vez). Que bueno que puedes disfrutar de unas friítas por alla y espero que te las disfrutes con gustos y recuerdos (ojo...acuesten a los niños temprano shhhh jejejeje)

Antonio_vzla dijo...

wowowowowowow...!!!! impresionante post..:! deverdad 0_o

Jackie dijo...

Pero Ale!!! Con esas referencias tan vagas quién te va a dar el nombre del sitio??? Le preguntaré a Lau cuando llegue, loquita.

Guachafitera dijo...

Que lenta estoy...sólo hoy llego a leerte. ¡Tranquila por la tarea, prefiero que estés inspirada para leerte con ganas! A mi también me mata morrocoy pero Mochima será y sigue siendo mi destinación preferida y los recuerdos de las veces que el peñero nos dejaba botados en una playita el viernes para irnos a buscar el domingo por la tardecita son únicos…

En cuanto a cervezitas…¡Después de la Polar sólo la Chimay!

Un besito